miércoles, 25 de marzo de 2009

Muestra: Mujeres en la cama - Vistas por ellas - Curador: Raul Cottone

«Mujeres en la cama vistas por ellas»

Sabemos que desde tiempos inmemoriales la humanidad ha tenido algunos pocos temas que fueron y son obsesiones permanentes: el amor, la locura, la muerte. Temas que motivaron e inspiraron estudios y realizaciones muy variados. En el devenir de la civilización se incorporaron otros como el tiempo y algunos de orden psicológico. En la mayoría de las consideraciones, la mirada sobre ellos fue masculina. No es motivo de este escrito el analizar las causas, sino observar los efectos. Hace poco más de un siglo, la mujer comenzó de manera sistemática a buscar su lugar en la civilización, tratando de superar el acotado espacio que el hombre torpemente y en aras de una supuesta y mal habida superioridad, le había asignado. Luego de aquellos comienzos conmocionantes del feminismo la mujer ha obtenido espacios importantes, que por derecho natural le correspondían.

Hoy la cuestión de género está instalada definitivamente en las consideraciones humanas, y en todas las culturas en mayor o menor medida. Debemos celebrar lo sucedido porque con ello ha ganado la humanidad toda, que se vio enriquecida con esa visión diferente del mundo y los sucesos de la historia.

Esto no puede desconocerse so pena de necedad, ya que esa particular mirada femenina unida a la mirada particular del hombre, en viva interrelación abre puertas a la posibilidad construir un mundo mejor.

Teniendo en cuenta estas ideas hace poco más de un año se me ocurrió plantear a un grupo de fotógrafas una mirada femenina sobre un tema: la cama, en el que el hombre tiene una particular y reiterativa visión, y así surgió «Mujeres en la cama vistas por ellas». Así fue que convoqué a fotógrafas de diferentes lugares, diferentes edades y por supuesto experiencias, lo que permitiría a priori una diversidad de propuestas. En la consigna se planteó la premisa de abordar el tema con total libertad.

De más está decir la agradable sorpresa que como curador recibí al ver los trabajos. En ellos aparecen planteados una cantidad de temas que contienen todo ese camino recorrido por la mujer en la búsqueda de un espacio propio, sus conflictos, dudas, temores, alegrías, aspiraciones y sueños. Mirada que adquiere mayor relevancia sobre todo en estos tiempos de un mundo que se ha globalizado en cosas positivas como una comunicación más fluida, pero que también ha globalizado las miserias humanas, exacerbando un consumismo alienado en donde, en una especie de involución, vuelve a aparecer la mujer como «objeto que promociona productos», lo que indica el grado de perversidad de una cultura que parece haber extraviado el rumbo.

Con esas referencias se pueden apreciar en la muestra que hoy se presenta, temas como la mujer sola que espera una satisfacción integral con un «otro» que no aparece claro; la mujer que aún en pareja, está sola y muestra esa carencia y la necesidad de contención emocional. Aparecen la melancolía, la primera relación y el miedo al embarazo no deseado; la particularidad sorprendente del ciclo menstrual. La mujer que es mirada a través del ojo del mandato tradicional que le veda posibilidades de realización. También el inconformismo y la búsqueda de ideales posibles como puerta para construir un mundo propio. Se puede observar con imágenes impecables la violencia sobre todo psicológica a la que es sometida la mujer y el uso de la fuerza para imponer una sexualidad mal entendida que se convierte en violatoria. En esa diversidad de propuestas aparece también la confrontación entre el mundo material exterior y el rico y fluido mundo interior que lo emparenta con la protección placentaria materna.

Este trabajo se nos presenta como una excelente manifestación en la que la mujer nos muestra ese mundo íntimo femenino, exponiendo su diversidad y complejidad.

Raúl E. Cottone

No hay comentarios:

Publicar un comentario